Hoy comenzamos un nuevo curso. Sí, los bichos no llegan hasta el miércoles 12, pero los profes ya vamos hoy al cole. Hay tanto por hacer todavía... La verdad es que estos días sin chavales me aburren soberanamente. Sé que son necesarios y útiles, pero me aburren, se me hacen eternos. Lo que da sentido a mi trabajo, lo que me hace levantarme con una sonrisa cada mañana es el contacto con esa panda de locos encantadores. Este curso sigo de tutor de mis bichos del año pasado. Eso me encanta. Es un grupo genial y me lo paso muy bien con ellos. Y como cada nuevo curso, me he hecho un montón de buenos propósitos. Uno de ellos es el ir realizando entradas de forma más regular en este blog. A ver si es verdad y empiezo a publicar de forma un poquito más regular. La vida diaria en el cole da motivos más que sobrados para explicar cosas... A ver si me animo a narrarlas, comentarlas, razonarlas...
Me temo que éste va a ser un curso duro. Algunos de los compañeros con los que mejor relación tenía no están en el cole. Les ha salido la oportunidad de "pasar a mejor vida" (es decir, irse a trabajar a otro cole en mejores condiciones) y, por supuesto, se han aferrado a ello como si les fuera la salud (la psíquica, desde luego, seguro). Otros, por diversos motivos, estarán fuera del cole durante el primer trimestre (bajas de maternidad, viajes al extranjero, etc...). De todas formas, más me vale escuchar mis propios consejos y mantener una postura abierta. Entrará gente nueva que me puede aportar un enriquecimiento considerable. ¿Quién sabe? Quizás de entre los nuevos surja esa persona que consiga que me anime y tire adelante aquellos proyectos olvidados o que todavía andan a medias.
Bueno, a todos los maestros y profes que empezais hoy el curso: Ánimo, suerte y paciencia...
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1 comentario:
¿Que pasa?
¿No hay deseos de suerte y esas cosas para los que no somos profes?
Si esque te descuidas y la gente se pone de un gremial... :p
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